I Jornadas de Ecografía de la semFYC
22 y 23 de febrero de 2019
Centro de salud Los Alpes.
Bultoma en brazo izquierdo.
Enfoque individual
Mujer de 63 años hipertensa y dislipémica sin otros antecedentes que acude al centro de salud por bultoma de 4-5 cm de diámetro no doloroso en cara dorsal del antebrazo izquierdo sin contacto con área articular de varios meses de evolución, con escaso crecimiento, de consistencia dura sin enrojecimiento ni aumento del calor local. No alteraciones cutáneas superficiales. Niega fiebre, pérdida de peso, pérdida de fuerza, parestesias, traumatismo reciente sobre la zona o síntomas asociados.
Hallazgos ecográficos
En la ecografía se observa una lesión de 4.5 cm en eje largo de ecogenicidad heterogénea con componentes grasos y otras regiones de diferente ecogenicidad; en contacto con la fascia del extensor largo del carpo; sin vascularización en el ecodoppler.
Pruebas complementarias
Se realiza una radiografía descartando calcificaciones de partes blandas así como afectación ósea.
Se deriva a cirugía general con sospecha de tumor de partes blandas para realización de biopsia y RMN. La resonancia se describe como una lesión de bordes bien definidos de 5cm de eje mayor e intensidad similar a grasa que impresiona de tumor de estirpe lipomatosa tipo liposarcoma de bajo grado; confirmándose posteriormente en la histología.
Desarrollo
La ecografía se considera la técnica de elección en la valoración inicial de un paciente con una tumoración de partes blandas por sus múltiples ventajas, siendo necesario realizar un diagnóstico diferencial con otras entidades frecuentes como lipomas, tenosinovitis, hemangiomas, hematomas; y otras menos frecuentes como sarcomas, tumores mesenquimatosos o miositis osificante.
Tratamiento
Se realiza extirpación quirúrgica completa con márgenes amplios y radioterapia posterior.
Evolución
Buena evolución posterior; asintomática en el momento actual.
Debemos conocer las diferentes características clínicas de tumores que se pueden presentar como \"masas\" de partes blandas, así como los criterios ecográficos que nos deben hacer sospechar malignidad.
La ecografía es una herramienta diagnóstica que goza cada vez de mayor presencia en los centros de salud, otorgando al médico de familia de independencia; y dotándole de la capacidad de sospechar y descartar de forma más precisa patologías potencialmente graves, realizando una intervención sobre la supervivencia de nuestros pacientes.