Promover la revisión de potenciales incidencias de prescripción para evitar problemas de seguridad en los pacientes, relacionados con la medicación. 

Desde la Comisión de farmacia de un Centro de Atención Primaria se realizó una intervención  seleccionando y trabajando  incidencias de seguridad en las prescipciones de medicación. Se seleccionaron las siguientes incidencias:  Pacientes con tres o más benzodiazepinas o fármacos relacionados por el mayor riesgo de sedación, alteraciones cognitivas y riesgo de caídas  Pacientes con AINE COX-2, diclofenaco o aceclofenaco y medicamentos indicativos de patología cardiovascular por el incremento de complicaciones cardiovasculares  Pacientes > o igual 75 años con inhibidor del sistema renina–angiotensina, AINE y diurético (triple whammy) por el incremento de fracaso renal en un 30%  Pacientes > o igual 75 años con medicación gastrolesiva sin inhibidor de la bomba de protones por el incremento de hemorragia digestiva  Pacientes con fármacos para la demencia de acción colinérgica y anticolinérgicos urinarios por su efecto antagónico  Pacientes portadores de absorbentes urinarios en tratamiento con relajantes del detrusor por la eficacia moderada de estos mismos y las posibles reacciones adversas     Se envió a los médicos prescriptores documentación y recomendaciones para trabajar la revisión de la medicación mediante correo electrónico, y se citaron estos pacientes con sus médicos en visita no presencial para poder llevar a cabo dicha revisión.  Se evaluaron resultados a los 3 meses de la intervención.

Un total de 107 pacientes presentaba incidencias de seguridad en la medicación que tras la intervención se redujo a 80 pacientes. Se observó una mejora en las incidencias de seguridad en la prescripción en los indicadores seleccionados.

El trabajo colaborativo multidisciplinar y disponer de tiempo específico para la revisión de la medicación repercute en un beneficio para el paciente y su seguridad.