Atención Primaria

Caso multidisciplinar

Aporte de informe de Urgencias, diagnóstico de crisis hipertensiva.

Enfoque individual

Antecedentes Personales: Varón 51 años, sin alergias conocidas ni antecedentes médico-quirúrgicos de interés.

Anamnesis: En analíticas posteriores de control se detectan cifras elevadas de glucemia en ayunas y colesterol. Nos confiesa que, debido a su estresante ritmo de vida, no cuida su alimentación ni realiza ejercicio. Realizamos test de Goldberg detectando niveles elevados de ansiedad. 

Exploración física normal, salvo cifras tensionales elevadas. 

Pruebas complementarias: ECG sin alteraciones. Analítica sanguínea. 

Enfoque familiar y comunitario

Trabaja como subdirector en una multinacional, lo que dificulta la conciliación de vida laboral-familiar. A pesar de ello, recibe gran apoyo de su núcleo familiar, formado por su esposa y su hijo de 17 años.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Hipertensión arterial que debuta como crisis hipertensiva. Ansiedad en relación con un gran estresante, su trabajo. Glucemia basal alterada en ayunas. Hipercolesterolemia. 

Diagnóstico diferencial: Hipertensión, hiperglucemia y dislipemia secundarias a otros procesos orgánicos.

Identificación de problemas: Vida poco ordenada, conductas y estilo de vida poco saludables y difíciles de modificar por sus condiciones laborales. 

Tratamiento y planes de actuación

La relación de confianza forjada en las sucesivas visitas nos permite, mediante la entrevista motivacional, reeducar su conducta haciendo hincapié en medidas higiénico-dietéticas como pilar fundamental para controlar la evolución de su patología. Establecemos visitas periódicas de seguimiento de forma multidisciplinar, incluyendo el cribado y prevención de posibles complicaciones. 

Evolución

Reticente a medicación, mediante la entrevista motivacional conseguimos concienciar al paciente para modificar su estilo de vida, pero cuando intenta disminuir su carga laboral, es despedido. Su red familiar y la influencia, en este caso positiva para él, de los determinantes sociales de la salud han favorecido el cambio radical de sus hábitos, permitiéndole dedicar tiempo a cuidar su salud, llegando incluso a normalizar algunos de los parámetros analíticos alterados sin necesidad de fármacos. 

El arma más potente y más característica de la Medicina de Familia es la prevención. Es fundamental entrenarse en la entrevista motivacional para llegar al paciente y reforzar las medidas higiénico-dietéticas como paso previo o complemento a cualquier medicación, siempre teniendo en cuenta el contexto del paciente, los determinantes sociales de la salud.