XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención Primaria domiciliaria.
Eritema y edema facial.
Enfoque individual
Antecedentes personales: sin alergias conocidas, sin hábitos tóxicos, no intervenciones quirúrgicas. Hipetensión, diabetes tipo II, Insuficiencia renal crónica, hiperparatiroidismo secundario, obesidad (IMC 31), insuficiencia venosa crónica.
Anamnesis: Mujer de 90 años que consulta por eritema y edema en ambas mejillas, que respeta orbitas y mentón.
No ha presentado fiebre. Según familiar ha presentado lesiones previas similares por lo que había acudido a Urgencias hospitalarias siendo orientado como celulitis facial y tratado con amoxicilina-ácido clavulánico.
Exploracíón física: placa eritematosa bien definida y calor local. No se observa puerta de entrada.
Enfoque familiar
Vive con la hija que es la cuidadora principal. Atención domiciliaria crónica. Viuda desde hace más de 10 años. Red social pobre: apenas sale a la calle.
Desarrollo
Erisipela sin clara puerta de entrada.
Diagnóstico diferencial: celulitis, lupus eritematoso, lupus pernio.
Tratamiento
Ciprofloxacino 500mg/12horas durante 7 días. Se insiste en la necesidad de extremar los cuidados de la piel de la zona y evitar el rascado explicando las posibles complicaciones que la erisipela conlleva y su potencial peligro para una persona de esta edad y con los antecedentes médicos que presenta.
Evolución
En la anamnesis dirigida la hija refiere que su madre se rasca mucho la nariz y que relaciona este hecho con la aparición de las lesiones.
La paciente presenta en los dos años posteriores 6 episodios de erisipela similar al descrito el primer año y 3 el segundo siempre en relación a episodios de rascado intranasal. Cada episodio se resuelve sin complicaciones con el antibiótico prescrito. Se le recomienda a la paciente y la hija que cada vez que perciban que la paciente se rasca más administren mupirocina intranasal durante unos días. Con esta simple medida la paciente no ha presentado infecciones en los últimos 6 meses.
A pesar de los avances en tecnología y pruebas diagnósticas que hay en el mundo médico actual, una buena anamnesis para identificar el problema subyacente y medidas higienico-terapeúticas simples, pueden suponer un beneficio importante para el paciente, además de una disminución del gasto médico.