Atención primaria.
Hipoglucemias sintomáticas.
Enfoque individual
Paciente de 82 años parcialmente dependiente para las ABVD, Barthel 55, con antecedentes personales de DM tipo 2 mal controlada, dislipemia mixta, cardiopatía isquémica estable, síndrome depresivo, tromboembolismo pulmonar, insuficiencia renal crónica tipo III y deterioro cognitivo leve con alucinaciones visuales asociadas. Con hepatopatía crónica posiblemente secundaria a síndrome metabólico.
Tratamiento habitual: AAS, amlodipino, atenolol, tiazida, valsartán, trazodona, quetiapina, insulina glargina, metformina, nitroglicerina transdérmica, omeprazol y bezafibrato.
Consulta por hipoglucemias sintomáticas acudiendo a urgencias hospitalarias en dos ocasiones y necesitando glucagón im en domicilio varias veces; teniendo que realizarse progresivamente un ajuste de la medicación, pasando de 28U habituales de insulina a 14U con suspensión de la metformina.
Ante un buen cumplimiento terapéutico, sin desencadenantes de hipoglucemias, sin cambios de peso ni hábitos de vida, se realiza analítica sin alteraciones relevantes y un TC abdominal que resulta normal.
Se revisan fármacos recientemente añadidos y se observa que dos meses antes se añadió bezafibrato por triglicéridos de 414 en analítica de control.
Enfoque familiar y comunitario
Vive con la hija con supervisión por ella las 24 horas.
Juicio clínco, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Hipoglucemias sintomáticas secundarias a interacción farmacológica.
Tratamiento y planes de actuación
Suspensión del fármaco tras consultar con farmacología la posible interacción. Control de glucemias.
Evolución
Tras la suspensión, la paciente presenta normalización de los valores de glucemia, llegando a necesitar aumento de insulina a dosis habituales.
El bezafibrato actúa uniéndose a receptores activados por proliferadores perosixómicos (PPAR), teniendo efectos sobre el metabolismo de la glucosa, aumentando su utilización y favoreciendo la acción metabólica de insulina. Revisando la bibliografía, se han comunicado interacciones de bezafibrato y gemfibrozilo con el uso concomitante de hipoglucemiantes orales e insulina, aumentando su efecto y produciendo hipoglucemias como le estaba sucediendo a nuestra paciente. Otros estudios incluso han demostrado que bezafibrato reduce la incidencia de DM2 en un 30-40% en comparación con placebo u otros fibratos.
Las interacciones y efectos secundarios farmacológicos son cruciales en atención primaria, la mayoría de nuestros pacientes están polimedicados y es necesario hacer revisión y valorar riesgo-beneficio de las prescripciones que realizamos.