Crear un espacio diverso en el que, a partir de las experiencias profesionales y de las iniciativas comunitarias puestas en marcha en el último año, entender mejor las claves de la salud comunitaria durante la pandemia y desarrollar modelos de trabajo para el futuro.  

El 29 de mayo del 2020 nace el Observatorio para la salud comunitaria y COVID-19, un lugar de encuentro virtual entre diversos profesionales que trabajan en salud comunitaria. Mediante reuniones quincenales a través de zoom se ponen en marcha diferentes propuestas: Conversatorios: se realizan 22 encuentros, algunos más orientados a consensuar los objetivos y el funcionamiento del grupo y otros abordando temáticas concretas en relación a la salud comunitaria, como la participación, la salud mental, el urbanismo o la equidad. Manifiesto: Se elabora un manifiesto en el que se reivindica que se tengan en cuenta las condiciones de vida y el papel de la comunidad para hacer frente a la pandemia así como la reorientación del sistema sanitario hacia la atención primaria y la promoción de la salud. Se hacen propuestas concretas para abordar la pandemia desde un enfoque centrado en la salud comunitaria, el empoderamiento y la participación activa de la ciudadanía.  Formación: se diseñan dos cursos de formación sobre salud comunitaria durante la pandemia y se imparten en una unidad docente de Madrid.         4. Investigación: se desarrolla una investigación etnográfica para recabar las opiniones sobre los                  conversatorios y las temáticas más relevantes identificadas por las personas implicadas.

El Observatorio ha permitido conectar a profesionales, de multiplicidad de procedencias, relacionadas con el bienestar y la salud para reflexionar, conversar y hacer propuestas sobre salud comunitaria.

Las redes de profesionales en torno a un objetivo común pueden ser espacios de apoyo mutuo en los que compartir saberes y experiencias que puedan mejorar la respuesta a la pandemia.