XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención Primaria
Caso multidisciplinar
Paciente de 25 años derivada por nuestra Matrona del Centro de Salud por presentar ánimo triste en el puerperio.
Enfoque individual
No alergias conocidas, fumadora de 1 paquete/día desde los 14 años. Niega otros tóxicos. Primípara, parto distócico reciente con cesárea. Refiere tristeza continua desde el alta hospitalaria, con descuido de su aseo personal y en ocasiones del cuidado del bebé. Niega ideas autolíticas o de daño intencionado hacia su hijo. Además, apetito disminuido y falta de sueño incluso cuando su pareja cuida al bebé. Ella lo relaciona con incapacidad para la lactancia materna, inestabilidad laboral y cambios en su cuerpo tras el embarazo y la cesárea practicada. La exploración física es normal y en la entrevista destaca apariencia descuidada, lenguaje coherente, sin alteraciones aparentes del pensamiento y labilidad emocional con llanto frecuente.
Enfoque familiar
Casada, familia en expansión. Trabaja como dependienta de tienda de moda. Presenta buen apoyo familiar y red social amplia. Nivel económico medio.
Desarrollo
El diagnóstico planteado es depresión puerperal, que hay que diferenciar de la psicosis puerperal, como forma más grave de patología de la esfera mental en puérperas. Los problemas principales son los mismos que encontramos para una depresión mayor de no identificarse correctamente, a lo que añadimos, los problemas en el recién nacido.
Tratamiento
Se derivó a Salud Mental donde se pautó tratamiento farmacológico y realizó terapia cognitivo-conductual, incluyéndola en grupos de apoyo. El seguimiento fue compartido entre Psiquiatría y Atención Primaria.
Evolución
Presentó evolución favorable con mejoría clínica, lo que permitió interrumpir el tratamiento farmacológico.
Los Médicos de Atención Primaria junto con otros profesionales, como Matronas, somos los encargados de realizar el seguimiento del puerperio, debiendo identificar aquellas patologías asociadas a este período. Debido a las complicaciones que puede presentar tanto la paciente como el recién nacido, es muy importante diferenciarla de la psicosis puerperal, la forma más grave. Aunque se desconocen las causas que la provocan, algunos factores de riesgo han sido identificados, como la primiparidad, el nivel social bajo, consumo de tóxicos, así como sentimientos de culpa o desconfianza hacia la maternidad.