XXXIX Congreso de la semFYC - Málaga
del 9 al 11 de mayo de 2019
Atención Primaria
Sí
Varón de 23 años consulta por lesión única en glande de 2 meses evolución de crecimiento lento, ni pruriginosa ni dolorosa, nunca sangrado espontáneo ni ulceración. Niega traumatismo directo previo. Última relación sexual hace 2 años.
Enfoque individual
Antecedentes de asma infantil sin tratamiento mantenido, dermatitis atópica en la infancia, acné vulgar recidivante facial y parte alta de tórax.
Exploración física: lesión papular aplanada única de 1cm diámetro en cara anterior surco balano-prepucial, morfología macroscópica estrellada y consistencia hiperqueratósica, bien delimitable, no descamativa, sin eritema subyacente. Al uso de dermatoscopio se observa lesión levemente indurada, coloración blanca homogénea y simétrica, y morfología estriada, sin otros hallazgos (fotografías disponibles).
Enfoque familiar y comunitario
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Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Por la consistencia hiperqueratósica y ausencia de otros signos sugerentes de etiología de transmisión sexual se orientó como un liquen plano. Mediante circuito de teledermatología la especialista nos lo confirma al describir las imágenes como estrías de Wickham.
Tratamiento y planes de actuación
El pronóstico es variable, por lo que se decide conducta expectante. En caso de molestias, dermatología recomienda corticoterapia o tracolimus tópico.
Evolución
El paciente no ha vuelto a consultar por cambios en la lesión pasados 5 mesos.
Los hallazgos dermatoscópicos pueden ser la clave ante lesiones con características de aparición y morfología macroscópica a priori inespecíficas o menos típicas, como este caso. El liquen plano suele aparecer en pliegues, mucosa oral o en áreas con cicatrices previas con mayor frecuencia que en mucosa genital. Clásicamente pápulas poligonales, de coloración violácea, brillantes, y característicamente pruriginoso. Al dermatoscopio las estrías de Wickham son patognomónicas, suelen estar presentes en alguna forma (clásicamente reticular, circular o radial) y se describen como proyecciones perladas en hoja de helecho. Saber distinguirlas nos aseguran prácticamente el diagnóstico y descartamos otros como psoriasis, dermatitis atópica o pitiriasis rosada.