III Jornada semFYC de Medicina Rural - Cuenca
20 de octubre de 2018
Motivo de consulta: varón de 81 años, fue visitado a domicilio por hematoma circunscrito en el pabellón auricular izquierdo, no fiebre, no dolor en la palpación. La familia refiere que hacía unos días que lo presentaba y desconocían traumatismo previo. También presentaba un hematoma peri-ocular izquierdo.
Antecedentes personales: Parkinson, demencia con deterioro cognitivo muy grave GDS-FAST 7 y disfagia entre otros. Su vida se limita a cama/sillón.
Se decide actitud conservadora dada situación basal y se cubre con ciprofloxacino.
Juicio clínico: otohematoma.
Diagnóstico diferencial: Traumatismo del pabellón auricular.
Identificación del problema: vida limitada a cama/sillón, con escasos recursos para su atención en el hogar, y politraumatismos frecuentes debido a la incorrecta manipulación en domicilio
Diagnóstico definitivo: Otohematoma (Pericondritis).
Evolución: Se revisa a las 24 h con mejora y disminución del tamaño del hematoma. Empeora unos días más tarde requiriendo ser remitido urgencias para valoración Otorrinolaringología (ORL) donde precisó drenaje e ingreso por resolución del cuadro, finalmente con evolución satisfactoria.
Durante el ingreso en planta de ORL, se aisla en el cultivo del exudado Enterococcus faecalis y Staphylococcus sp. Coagulasa negativo. El paciente recibe cobertura antibiótica endovenosa durante 4 días evolucionando de forma regular y decidiendose finalmente el desbridamiento quirúrgico y extirpación del cartílago necrótico consiguiendo así el control del proceso infeccioso.
El otohematoma es una entidad frecuente por el ORL, pero poco frecuente en la consulta de Atención Primaria (AP). Se produce por la acumulación de sangre y fluido seroso entre el pericondrio y el cartílago del pabellón auricular. Los mecanismos de producción suelen ser traumatismos contundentes contra el cráneo, o traumatismos leves y repetidos (auriculares y cascos de protección) o incluso para estar mucho tiempo encamado sobre la oreja.
Debido a la anatomía del pabellón auricular, si el otohematoma se sobreinfecta es más susceptible de complicarse en condritis, por tanto precisa ser valorado por ORL. El tratamiento consiste en la evacuación del hematoma y posterior prevención de su reformación con un taponamiento selectivo del pabellón y un compresivo cefálico durante 2 semanas. Precisa cobertura antibiótica para evitar sobreinfección.
Las condritis y pericondritis auriculares son raras afecciones infecciosas del pabellón auricular, generalmente agudas, aunque en pacientes (diabéticos, irradiados) pueden adoptar una forma subaguda o crónica, la gravedad de la que deriva del riesgo de secuelas morfológicas cuando el tratamiento no se inicia
de forma precoz. La nutrición del cartílago se produce por difusión a partir del pericondrio, de manera que cualquier traumatismo puede comprometerlo.
El diagnóstico de sospecha es clínico y precisa cultivo del exudado o de la puerta de entrada de los gérmenes. Cuando nos encontramos ante esta patología debemos realizar derivación urgente para valoración por ORL, para evitar complicaciones como la necrosis del cartílago auricular con deformación posterior del pabellón y llegar hasta "oreja en coliflor" o "oreja de boxeador ".
Ante el diagnóstico de pericondritis del Pabellón Auricular se debe ingresar al paciente para poder iniciar tratamiento parenteral activo para Pseudomona aeruginosa y Stafilococos. Previamente tomar muestras para cultivo.
El tratamiento quirúrgico es necesario en las formas en colección o fluctuantes y si existiera necrosis extensa para hacer resección hasta la zona de piel sana.
Aplicabilidad: el otohematoma es una entidad poco frecuente en la consulta de AP pero no excepto de presentarse, por lo cual este caso es de especial interés para aprender su manejo, su forma de presentación y actuación ante el mismo.